Estoy y tú no estás.
Tú ya nunca estás.
Busco olvidar la sima
que has dejado
y no encuentro alivio en los fotogramas
ni tampoco en la música,
la evasión es tan imposible
como el equilibro.
Ni siquiera hallo sosiego
en la escritura
pues he perdido la palabra
de tanto echarte de menos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario