despedir sin terciar palabra.
respiras profunda,
tu mirar se ondula y nada crispa el leve temblor del verano.
eres nueva. desconoces. estás aquí permaneciendo ajena:
ajena a los clavos
a la hiel, a la sal.
desamarrando palabras atragantadas
sonríes al escenario tan claro
y el miedo escapa
porque sabes pisar sus charcos,
siéntete mejor
pues hoy te buscarán, pero aunque estés, seguirás siendo esa desconocida
que huye como noche hipnótica.
No hay comentarios:
Publicar un comentario