poesia terapeutikoa
sábado, 18 de junio de 2011
he aquí mi temblor crucificado,
la espalda de los hombres sin rostro,
aquella llamada desapercibida en el mar,
me has desatado la ausencia,
espero una pronta curación.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Entrada más reciente
Entrada antigua
Inicio
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario