martes, 30 de mayo de 2023

Hay una corriente 

que no me deja descansar

tal vez sea la luz de las pantallas 

a las que vivo adherida

o esta falta de de certeza

que me araña la garganta. 

He de huir mucho y rápido 

a diario

a través de la tierra, a través del asfalto,

a través de la rutina, a través del cansancio.

Cuando busco paz, Google me responde 

con palomas y ramas de olivo,

o con la capital boliviana.

No es satisfactorio

(como los análisis lingüísticos de ChatGPT).

Qué hago con tanta gana,

qué hago con tan pesado miedo,

cómo me vuelvo liviana. 

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