viernes, 15 de julio de 2011

lento,
pausado,
como el agua de un canal sin visitantes,
como la espera de un barco nocturno,
es mi pulso
al tratar de encontrarme
en algún reflejo,
en algún muro.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

me gusta mucho .El tiempo de la realidad , nos ciega y puede matarnos poquito a poco pero también es la excusa para indagar en la búsqueda de nuestra identidad.

ane dijo...

muchas gracias :)