martes, 30 de noviembre de 2010

atravesaron el umbral
de los cuerpos de hierba.

Ella llevaba una cinta roja,
él un sombrero azul.

de refilón,
te miraron cuando pasaste junto a ellos:
se te detuvieron las décimas:
los viste como quien ve algo parecido al amor,
el sufrimiento y la belleza iban juntos de la mano,
como nostalgias en la boca de un sueño alegre.
el pájaro
se ha vuelto sordomudo
por voluntad propia.

oír duele a veces
pero dicen que es aconsejable.


¿qué quieres?
¿por qué llevas resina en la voz?
la huella de todo cuerpo se debilita
al caer la luz

luz
tú preguntabas por ella
como preguntan los árboles por los días que se marchan,
luz,
aquí la tienes,
en este suelo de lluvias recientes,
y te veo en un charco de fuego azul,
dicen que eres el secreto
de los juegos de cartas

la voz que ningún cielo se atrevió a escuchar.
nada te asusta
cuando nada más
puede fallar
y solo una voz sabe oírte..

quien no se apega a nada
quien no se acerca a nadie
es invulnerable
como las piedras de la catedral.

poema 3: Elena Nieto

El ser humano está harto
de estar limitado por leyes naturales
¿por qué vivir cien años?

el mito también muere.

quiero estudiar criminología
porque
cada poema que escribo
es el cadáver
de lo que fue un sueño.

Disecciona los mitos.

humor.

si la risa es algo contra dios
quiero pasar una temporada en el infierno.
hábitat
de jaguar aprisionado,
la musa se queda helada
junto al estanque de deseos exhaustos,
lo censurado escapa
a la república de hojas secas
y nos quedamos con todos sus nombres.

el resto
es solo un díalogo de peces poco participativos.

entre dos ríos de misma lluvia,
el cuerpo
que no se somete
vigila su voz
siempre en guerra sigilosa.

Segundo poema de Elena Nieto:

juego al ajedrez
como a la vida misma,
es decir, sin pensar.
el ciervo no puede respirar
las murallas de cal
han obstruido
sus pulmones,
sus pulmones son una jungla de cielos
que callan.

el ciervo, jadeando, pasa por el trance del gesto
que no supo fingir.
el espino
lleva flores en el cuerpo
la otra vida no existe
o simplemente no interesa,
las adelfas
cerca de
precipicios
reflexión ineccesaria
necesitamos
este mundo caótico.
las manos del padre
de los niños que dicen
no quiero,
el cuerpo de la mujer
de ojos de lluvia,
una soga en el cuello
del pájaro,
y tan lejos de la piedra
que pusimos en la montaña
llegamos al mar
para que me ahogara
antes de llegar a la isla.

se me quiebra la voz
cuando me destruyes
hilo
a
hilo

mientras tanto
juego a no padecer
al menos en público.
es el gesto
del que no hablamos,
el pudo ser
que nunca sucedió,
lo que dejas sin escribir
al pensarlo dos veces

lo que queda en ti
cuando ante nadie te proyectas.
llegó de oriente
con una flor de loto,
perlas de un pantano sin nombre,
y cinco palabras de hierro
para hundir los barcos que quieren volar,
para desteñir orgullo que asfixia,
para acabar con los hombres del traje gris,
cigarrillo caduco
y esquemas para no perderse.
no

que me aportan
tantas palabras antiguas
que aún quedan en el cenicero del recuerdo.
los cuerpos se han detenido
antes del final de la música.

no me busques en la voz eléctrica
de la última ventana con luz.

los cristales
camuflan
el tiempo retenido
en los rostros.

parece ser que hay otras sombras en insomnio permanente,
pero por se acaso,
apago la luz
aunque permanezca con los ojos abiertos.
llevamos medio siglo sin aspirar a ser felices,
porque lo tenemos todo
y todo vale,
porque solo lo que defendemos
nos salva del rugido del tren,
porque los matices del cielo
estallan cuando muere noviembre


pero esta mañana estoy contenta,
sé que en algún lugar, estás.

dime que vendrás

y la noche se repita
como la cicatriz de un verso,
como nosotros en vida sin excusa,
como la luz que lo embargó todo
para ecliparse durante una eternidad.

dime que vendrás
y no saldrán de mí
más palabras de duelo,
más temblores en la voz.
las adicciones se revelan cuando empiezan a sentirse olvidadas,
salen del principio del vacío
robando el chocolate a las mujeres que sufren,
quitándole el caramelo al niño,
desvistiendo el ideal de un soñador.

las adicciones vuelven como lo que nunca se ha marchado del todo.

lunes, 29 de noviembre de 2010

se ha destapado la boca de la nada,
ahora podemos ver su dentadura profidén
y nos asusta sí,
nos asusta más de lo que habíamos aventurado.

las calles se quedan tan solas
alguien te dice hasta luego
al girarte
recuerdas,
pasa un camión de la basura,
puedes resbalar...


la noche te llevará a un día que derivará en otra noche
y tú
y tus zapatos
y tu historia
en pos de un cuerpo sin identidad definida,
en las horas muertas del sueño que no llega.
extraño hablar con alguien libre
Ben Clark.


el nido de los pájaros
está cerca del último cuerpo en el mundo.

la brisa llega a las ciudades del mar,
Nueva York es un desierto de ruinas centenarias
y solo queda
un hueco para tu voz.

el apocalipsis ya pasó.
no queda vida
solo libros,
espuma,
sal,
piedra,
un nido de pájaros
y tú, último cuerpo en el mundo.

imitando a Juana Castro

Dafne se ha roto las uñas
al ser tentada con amor y chocolate,
mujer de flor de magnolio y trufa
sucumbe a otra droga dulce
tan bella
como sola.

Tiene alondras cerca del cuerpo desnudo,
su tierra nevada la exilió hace años,
cuando no vivía con la víbora de la distancia,
cuando su alcoba no era noche de huella terrible.


Y la carne es manzana dolida,
un lirio en su húmedo espejo de nombres.
Dafne es sangre floreciendo tarde,
savia que ama sombría como la luna .

Esta noche, las brújulas de cristal,
los aromas de azahar y lluvias azules,
las rosas en guerra,
esperan el milagro que la salve.
somos el guión que Billy Wilder nunca supo reflejar,
la cuenta pendiente de Woody Allen,
la única carencia de Wong- Kar- wai,
el tema que Truffaut dejó a medias.

Por eso nada nos explica,
nada nos entiende,
nada nos sacia.
céntrate en el centro de tu vida
y encontrarás un baúl tan vacío
que tendrás que cerrarlo antes de que te asfixie.

Venga:
llénalo con momentos que te hayan aclarado
la voz,
que hayan definido la lluvia
que encierran tus ojos,
con el tiempo que vamos robando al olvido.
contorsionista del lenguaje
juego con las metáforas
hasta que como quien se arriesga,
un día me quemen.

El joven Werther

atrincherado
en el diagrama de un estadístico
Werther tiene frío.
Se oye el rugido de las carreteras,
las avenidas tienen prisa,
suenan como caballos en campo lejano.



Werther tiene frío
y las cortinas se queman con los fluorescentes de la ventana:
feliz navidad
rezan los paneles.


Werther tiene frío
cuando mira los árboles de plástico
apágandose
encendiéndose
como si fueran vidas.

Vaga por bares a punto de cerrar,
nadie repara en él,
son las tres de la mañana,
Werther tiene frío.


Venden pizza pero no tiene dinero,
dicen que es casi navidad,
la nieve cubre la corrupción del asfalto,
Werther tiene frío y no sabe dónde está.
kamikaze de palabras nubladas
vuelvo a ti impulsiva
y borrascosa
como Emily Brönte,
como el deseo de un niño,
como el amante impaciente,
como Lord Byron rechazado,
como una ola en la marejada,
como el alma demasiado grande en un cuerpo de juguete,
como la voz que quiere ser escuchada por naúfragos en la nada de un verso,
como el gesto desprevenido en este ahora que lo enciende todo.
has salido con vida
de mil trampas poéticas.

ahora, en tu laboratorio,
te alejas de las palabras,
de los signos,
de la poesía,
pues hoy solo quieres lo comprobable,
ver el mundo desde un microscopio,
donde las formas no duelan,
donde la abstracción no te abrume.

LOS PARCHES DE LA MEMORIA

Esperan bajo el reloj a las cinco y media de la mañana, es lunes, podría ser Noviembre. Apenas se distingue la plaza bajo el anochecido llanto del cielo, solo dos figuras en la penumbra. Él fuma intranquilo, como tratando de suplir una carencia, a la vez que, con sigilo de gato experimentado, la observa cauteloso. Ella, por el contrario, parece hallarse lejos, mientras, absorta, contempla cómo la lluvía parece desconchar las piedras. Su rostro le resulta extrañamente familiar, el tiempo no ha desdibujado esa expresión etérea. Sin embargo, es incapaz de hubicarla en ninguna parte.

-¡Diluvia!-dice él.

Ella deja al silencio tensar las cuerdas del aire durante una aparente eternidad.
-Obvio, es más original el por qué de nuestra espera aquí, y el hecho de que ambos estemos completamente sobrios. -De improvisto, el desasosiego atrapa la lluvia y escribe una melodía ya conocida por él.

-¿Tienes fuego?-pregunta ella, y deja que atisbe el reflejo de aquel niño que jugaba a ofrecer fuego imaginario, siempre desafiante, mirándolo solo a él tras el cristal..

-Fumar mata.-acierta a decir al pasarle el mechero.

-Usted y yo sabemos que la muerte es también un aprendizaje.-y se marcha, impasible ante la lluvia que todo parece arrasar.

Menos de tres horas después, él compra parches para dejar el tabaco.
el invierno decide castigar al poeta,
así escribirá mejor,
el dolor crea belleza,
sabes que el día que lo tengas todo
dejarás de escribir.

y el cielo seguirá siendo cielo aunque no lo nombres,
la piel seguirá temblando,
el paisaje seguirá conmoviendo,
habrá caminos en el mar.

la poesía necesita incertidumbre

la incertidumbre es una metáfora
en la boca de las nubes,
es el arte del gesto inadvertido,
la música de la piedra que oculta su sensibilidad.

domingo, 28 de noviembre de 2010

tal vez fuera aquella chica de ojos castaños
que te dejó interrumpido
el tercer día del hueco en tu voz

o solo el sueño de agua
que quiso ser más alla de la piel

o el fantasma que te encontraba
en las calles abruptas del deseo

o quizás ese deseo caduco
en el impulso del tigre.


Y la libertad nos agobiaba
por ser una palabra demasiado grande
y me quedé en el umbral de la puerta,
casi en ti sin conocerte.
Y el tiempo se cayó
como caen las gotas de agua
para que el grifo
de la vida siga su curso.

ahora
aquí
hoy
coso ausencias
en el costado del sol.

soy piel de sauce
que quema estrellas
piel adormecida en el cristal
de tu cuerpo
piel de sombra versátil

piel que permite
que las baldosas lloren tierra mojada
que las naranjas
necesiten tu boca en invierno
que los años
se posen en ti como pájaros de humo,
pájaros
que como este poema
jamás podrán ser atrapados.
mira, nuestros nombres tapiados
en el bostezo del olvido.

hay tráfico en la avenida de los cuerpos descuidados.
y tú me observas.
y yo fingo no percibirlo.

sometidos a ser libres,
existiendo a veces por inercia,
con nieve en los brazos,
con azúcar en la herida.

el paisaje nos detiene un instante.
después, nos miramos.

deja que te quiera oscuramente,
como se quiere
lo que duele de verdad.



hay sombras que nos llevan
más allá del tiempo.

hay lazos que nunca se rompen
del todo.

hay cuerpos en la revolución de la luz.

hay formas de mirar el amor.

hay imágenes que no tocarás.

hay mentiras que suenan a jazz.

I cry I river over you....

y las horas se resignan a dejarnos pasar.
y creo que en el motel más lejano del desierto
hay besos parecidos al deseo.

y aquí,
¿aquí?

hay memoria donde nadie la llamó.
alguien me dijo
que tú habías dicho
que él pensaba
que ella iba contando
lo que pasó aquella noche de diciembre.

you don't know me baby.

paseas.
sola.
el frío se pega a tu bufanda de flores,
tus ojos descansan lejos
recordando haber amado algo que no llegaste a conocer.
al este de mi cuerpo
te encontraste con el mar,
había erizos y algas
pero no los tocaste,
el recuerdo perdura
pero nunca contarás su metamorfosis.
la voz del domingo es ronca,
nos duele la garganta
después de tanto grito,
hemos roto todas las jaulas,
el cuerpo descansa
un poco más,
pronto reconoce a tarde,
pero el tiempo se diluye
en cielos de invierno.

hoy,
al despertar,
solo deseamos hundirnos en la luz vespertina.

sábado, 27 de noviembre de 2010

curiosamente

al buscarte tanto me he encontrado a mí misma,
por eso,
satisfecha vuelvo a casa
sin preguntar por ti.
iré donde tú me lleves,
da igual,
la marea me devolverá a casa
cuando el nudo se rompa,
cuando el viento
apage los ojos,
cuando las uvas se agoten
en mi pelo de vino
y no quede nada que contar.

las historias con enseñanza moral
y final concluyente
nunca fueron
para pájaros de fuego,
nunca para viajantes de la voz.

iré donde tú me lleves,
da igual....

octubre

soy noviembre,
gélido y orgulloso
como el poeta o la musa.

y sí,
sabes que te he superado.
soy el trastorno bipolar
en tu piel( siempre a la defensiva)
el avión que surca el cielo
cuando no lo miramos,
un taxi, un vagón
para llevarnos
a otra parte,

solo dime
que despegaremos otra vez.
cuando cantabas Sweet home Alabama
creía que me llevarías lejos.

Y lejos llegué, pero no contigo.
es una canción
que nunca deja de bailar en sus ojos de coca-cola,
un twist con patines,
una fuerza sin razón ni siquiera
intento de lógica,
esa luz de los amaneceres tardíos.
¿RESPIRAR?

el último cigarrillo de la luna se apaga
tan rápido como crece un capricho
tan lento
como desterrar una espina.


TÚ dices que la luna fuma chester
YO creo que lucky strike....

estamos dormidos

¿O NO?

venga, ¿DESPERTAMOS YA O QUÉ?

¿derpertar?
¿QUÉ DICES?
pero si ayer no pudiste dormir...


LLEGAS al CIELO
y es el desierto helado
de los escaparates vacíos:

¡VAYA!

no te lo esperabas


¿sabes qué?

TAMPOCO ESPERABA yo

que aunque TÚ me lo pidieras

DECIDIERA NO SEGUIRTE hasta allí.


Y AHORA, tienes el cielo
lleno de MANIQUÍS y V-A-C-Í-O
solo para ti.
tantos quizás
y "espera un momento"-s
nos llevaron a la frialdad inalterable
de una mesa
y unos apuntes sin té.
la piel
estuvo cerca
pero ya nada mitiga
el cuerpo sin abrigo.

y mientras tanto,
la calle al mediodía
es desierto de voces.
despierto con la sed de antes de ayer
y mirando por la ventana
encontrarme con un hombre dibujando manzanas,
las palomas entre uralita y teja casi gris,
cielo azul
como un póster en tu habitación,
ceniza
de un beso a las tres y media,
mi boca es caricia desgarrada,
mi cuerpo el zarpar de los barcos.

viernes, 26 de noviembre de 2010

escribir demasiado nubla la sensibilidad
de la estatua de hielo,
el viento norte,
las murallas del silencio,
un juego,
una palabra
se ha perdido,
y nada funcionará,
hasta que alguien encuentre su resorte.
sonrisa ingenua,
lápices de colores
los rododendros,
mi cuerpo atardeciendo

y tú, tú, tú,

me faltas como hoja en invierno.

ey,

solo sé
que pertenecemos al mismo campo mágnetico.

perdona....¿Cómo te llamabas?
la luna
esta noche
tampoco está
in the mood.

el horizonte nos ha expulsado
cerca de las tumbas
tengo tierra en las manos,
él un abismo en la sonrisa,
tú llegas con los ojos pálidos.
quizás sea crucial
que mi voz se disimule
en muchas otras.

pero creo que hay verdades que el hombre acalla
con recursos literarios.
conducir en autopistas vacías,
bajar al fondo del lago
y ver que el barco del que te hablaron nunca etuvo allí,
los acordes del sol
son tenues en invierno,
las montañas son necesarias
porque no decaen,
escalo los riscos de tu ausencia
y tengo las alas plegadas,
el olvido me acoge cálido
durante cinco minutos exactos:
resbalan las capas de mi voz,
hay crisáidas que no se rompen,
hombres que viven en jaulas que han pagado
( o están pagando a plazos),
demasiado deseo inmediato
y necesidad de rellenar grietas
con productos anunciados en las marquesinas.

Nada sacia esta sed,
el impulso de la tarde
contra la distancia,
ayer pedí que me hicieras invulnerable
pero por lo visto,
tenías la música dmasiado alta,
y
me
has
dejado

c
a
e
r
.
.
.

Final de un poema de Lord Byron

Y si pretendes con tenaz empeño
Seguir indiferente tu camino...
Obedece la voz de tu destino
Que odiarme puedes; olvidarme, no.

de Hubo un tiempo...¿recuerdas?
Un gesto
para que las paredes digan no
y se nos caiga el silencio.
Un gesto
porque los pájaros de lluvia han muerto de frío,

Un gesto
en ti que no invada mis estrellas impacientes,

Un gesto
para no reunirnos en tanta nada.

Un gesto
para encontrarnos en una fabela en el fondo de la luz,

Un gesto
que grita sin voz hasta romper los cables del ordenador,

Un gesto
para tener más cuentas en el collar de los días,

Un gesto
mío,
porque a ti ya no te quedan.
zure zeruan iltzaturik
helburua galdu ondoren
nora joan?
ximeltzen zaizkigu orduak
eta bitartean,
gu soilik irribarreari eusten.
*******************************

clavada en tu cielo
después de perder el objetivo
a donde ir?
se nos marchitan las horas
y mientras tanto,
nosotros solo aguantamos la sonrisa.
acércate
solo contempla
cómo llegan nuestras ruinas
al cuerpo de la tierra

ayer fue mañana con maquillaje,
ayer fue una secuela que roza lo venidero,
ayer fue un día con gesto de noche,
ayer fuiste tú en muchos otros,
ayer tu voz de piedra se quebró
y nadie fue consciente.

¿te acuerdas?

nos creímos naufragos en la botella del mar.

Jueves universitario.

esto es despertar tras las cortinas
y que la luz sea
sombra en la garganta.

estos son los ojos de agua fría
donde resuena el eco de lo que
la noche pudo ser
pero no fue.

jueves, 25 de noviembre de 2010

soy el tigre que desafía
tus palabras
la reina que te derrocará
en la última jugada.
el cielo huele a azufre,
la tierra finge no temblar,
precavida.
mis manos son madera de arce
y la lluvia un poema de otro tiempo,
hay libros que nadie se ha molestado en abrir esta mañana,
mi cuerpo es un sueño desierto
de nubes con doble identidad.
hoy la música de la calle
no es tan antigua,
el sol tiene los labios secos
y tú no has despertado aún.

al abrir los ojos, no te olvides:

esta ventana sigue allí,
donde ayer la dejaste.
y buscar en los puntos cardinales
un equilibrio
que solo en los diccionarios parece existir.

el azul de los días se me pega a la suela del zapato
las paredes del barco están astilladas
pero el mar es más cálido
de lo que mi piel imaginó

el laberinto de este mar de piedra
me pierde en palabras que no pronuncio.

dime qué hacer
para llegar templada
a la quemadura de la luz.
es curioso
como la muerte se parecía a ti
de lejos.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

juraría
que te he visto
¿o era otro fantasma?
la estructura del cielo
se me cae sin ruido.

hay trampas en los acordes de mi voz,
hay gestos que destruyen tu sigilo de gato.
qué divertido
es sentirse vivo
en la noche del cuerpo,
ser un pájaro rojo
en la destrucción de un día demasiado azul

qué divertido
es dejarse soñar
en otros yo-es
sin que ellos
cambien tu expresión.
mi corazón es un cenicero.( Placebo- Ashtray heart)

y lo que no sabías
es que hasta mis cenizas
regeran tu raíz.

amenaza extravagante

si me traicionas
vendrá un huracán de boca fría,
en sus brazos llevará cristales
y dejará que te devoren las hormigas....

pero hay algo mil veces peor...

si me traicionas, secuestraré tu facebook.
los extremos
no nos entienden,
la línea se tambalea
rompiendo el cuadro,
al oírte gritar
solo te pido:

no subas la voz
o romperás los cristales.
la libertad es algo tan ajeno
porque siempre lo has oído en boca de otro.

no hablemos de lo inabarcable,
de lo inexacto,
de lo ausente,
dime algo que veas aquí
y para variar, no nos mienta.
me encontraste
cuando ya me iba,
en la respuesta
de un verso roto,
en el silencio de una silueta
que no conozco todavía...

todavía es pronto para ser mañana
y sigo en el mismo desorden
de ideas sonámbulas.
Menos mal
que hoy me acogen los silencios de la luz.


me encontraste ya atardecida
como un otoño demasiado versificado,
como palabras para desatar
nudos de cemento.
me necontraste pero no me dijiste nada.

tu espera
fue una noche de piedra y luna nublada,
la observaba siempre
distante pero cerca.

martes, 23 de noviembre de 2010

la ciudad callada,
un grito en la niebla,
el puente nos guarda,
la noche nos lleva.


La luna nos sumerge en su gélida calma
el sueño llega....

llega y nos adormece las palabras...
las guarda en pañuelos de seda,
no quiere que hoy también nos hieran.

Mary Shelley

el creador deja que su monstruo hable,
sonriendo encantado de experimentar en otra piel:

No sabe que ya son piezas del mismo juego,
ese cuerpo, esa voz, esa mirada siempre volverá a él.

Demasiado tarde: la vida lleva unas contraindicaciones que no le apeteció leer.
cómo nos ahoga el tiempo
cuando se vuelve inflexible
y no se estira
como lo habíamos esperado.
pasividad
es lo único
que no permito
ante un poema.

porque al sentir caen las metáforas,
porque hay ventanas que necesitamos mantener
para sentirnos llegar a la luz de esta lluvia.

el día que mis palabras dejen de contarte algo,
ese día,
se habrá agotado la poesía en mí.
Son los huecos de silencio,
esas ausencias que hablan
Lo que me gusta
encontrar
En tu palabra.
Otro reto,
Sonríes al palpar la vida a tientas,
Sin luz,
Hay más sombras en la misma habitación
Y a ti, siempre te ha gustado desvelarlas.

Un poema de Elena Nieto.

No es que sea aburrido,
Simplemente carece de elementos llamativos.

lunes, 22 de noviembre de 2010

y quedarme así,
esperando a que algo cambie de lugar.
las utopías no me sirven,
solo pido algo diferente,
un cielo más claro,
una voz más fuerte,
un cuerpo menos azul.
y febrero sufrió
con tanto amor desesperanzado
como esos tangos que ya no se componen,
como noventa y cinco poemas de lluvia en una sola voz.

homeópata

La llevaron con apenas cinco años.
Él homeópata, nada más verla, sentenció:
" Para ella nunca nada será suficiente, jamás será feliz, siempre creerá que la quieren poco".
y después, más tranquilo, decidió recetarle aquellas bolitas blancas con un nombre extraño y sabor a caramelo.
a veces soy un exraterrestre
en mi propia habitación,
alguien que ve de lejos
siluetas que son vidas,
vidas vivida a través de un crital,
quizás sea esa la razón
por la que nunca enciendo la tele.
ez dago kaiolarik bizipen boteretsuentzat.
El silencio es la piel de un sauce gris.
La piel se cansa de tanta memoria
y pide ayuda al pez,
pues en 3 segundos de recuerdo
desea renovarse.

Y que no exista ayer. Y no vivir esperando un mañana.

La vida empieza hoy.

¿De qué quieres que hablemos?
cada uno debe llevar su brújula,
a mí no me vale la tuya,
ni a ti la mía,
aunque el laberinto sea exactamente el mismo.
si sigues bucándote a ti mismo
acabarás perdiendo a los demás.

aprende a ver
más allá de tu ordenador,
más allá de tu palabra,
más allá de esos límites que tanto tiempo llevas trazando.

solo vive de verdad quien sabe escuchar,
solo escribe quien sabe encontrar belleza en las palabras,
solo canta quien entiende su vida como una melodía.
¿Cómo quieres vivir tú?
no sé por qué
hoy pasan las horas
pero no he despertado,
se me despegan las ideas al andar,
llueven los recuerdos sobre la piedra,
me mareo un poco
pero los viandantes caminan ensimismados,
ignorando que me pierdo,
hablando de una noche que no es mía.

todo empezó
al alejarme de la raíz,
la casa está lejos,
aquellas ventanas verdes
ya no las veo,
los que me rodean
son rostros que no están.

Quizás sea un barco en medio de la nada
mi garganta sea el mar,
mi lenguaje ya no me pertenezca
pues son sus palabras de algas y sal.

y esto...esto solo un espejismo de lo que fue mi vida en tierra.
viniste como llegan los niños a la escuela
te quedaste muy cerca de la barandilla
como si fueras a huir,
aún no sabías que el valiente es quien aprende a permanecer.
el día fue mi último poema
me dijo el sol antes de morir.

la noche llega a deshora,
con las manos heladas
y canciones para quien sepa escuchar.
Antes de despedirnos, sé que te veré donde no llega el frío.
no trates de entender
lo que no quiere ser entendido.

deja que las lágrimas se sequen
pero siempre detrás del biombo.
soy el retorno a la raíz,
un presagio de las lluvias,
la voz de la mujer de katiuskas rojas,
cinco secretos bajo el ala del cuervo.
antes de salir de casa,acuérdate:

el genio nunca fue sociable,
jamás se molestó en que lo comprendieran,
por eso se sintió invariablemente solo.
llaman por teléfono.
pero no, no lo cogerás,
no es a ti a quien buscan
y lo más sorprendente
es que, por primera vez, te de igual.

No te equivocas al decir
que las horas nos enseñan un poco.
buscar un camino para salir
del banco de niebla fría,
encogerse ante el vendaval
de palabras muertas,
susurrar promesas
archivadas en cajones oscuros,
sentir el invierno
desde la cálidez del fuego.

¡No sigas por ahí!
la luz se queda en quien deja de buscarla.
¿y si el presente se ha quedado dormido?
¿y si esto es solo el eco de una voz en off?

porque según dicen,
en aquella ladera
se oyen aún los cantos de quien ya no está.

domingo, 21 de noviembre de 2010

cry me a river...

ven.
te comfortaré
con las palabras que no pude creerme
en su momento.
las palabras inconscientes
resisten
los muros del olvido.

nos callamos en el tercer arpegio,
somos aguanieve,luz menguante,
cuerpos de otoño, hojas secas y polvo.

el cristal nos refleja solo a veces,
cuando dejamos de ser extranjeros en nuestra propia habitación.
¿Con qué cara de te quedas?
elige mientras me acerco,
las nubes no se moverán,
el barco sigue atracado en el muelle,
su piel ya oxidada
nos sumerge despacio.

El agua siempre huye de las manos,
nuestra visión es siempre subjetiva,
la belleza también sabe mentir,
mira, el agua, huyendo azul...

Finjamos que el barco zarpó a tiempo,
dime que el tiempo es nuestro y no de otro alguien,
bailemos como ayer
cuando no mirábamos tanto los relojes.

sábado, 20 de noviembre de 2010

está bien
pero no te excedas
te dice la luz,
no te excedas
te dicen los márgenes.

pero tú,
llevando la contraria,
aún crees que mientras el sermón nos ata,
la libertad nos eleva.
mientras él escribe
ella permanece con los ojos cerrados,
la noche es una sábana sobre la piel
donde los juegos quedan ignorados.

Atrapanda en la sutilidad de un gesto
la belleza del instante es incontenible.
quieres desmayarte
para soñar con un mañana
lleno de luz,
pero mañana, mañana aún está lejos.
¿y si cambio los visillos?
¿y si me caigo como una de tus hojas?
¿y si vienes a romper mi silencio antes de que me vuelva gris?

no hay contestación
la vacuidad invade las mentes,
no prestas atención al juego
pues estás lejos de ti misma,
sumida en las horas que se pegan
para no marcharse.

viernes, 19 de noviembre de 2010

parte II de Alas de Ted Hughes

II
Kafka escribe

Y él es un búho
es un búho, «hombre», tatuado en el sobaco
bajo el ala rota
(aturdido por la luz cayó aquí mismo)
bajo el ala rota de inmensa sombra que se agita sobre el suelo.

Un hombre de impotentes plumas.
aquí traigo
los pasajes que ardieron
con la llama azul del olvido
y mi cuerpo es una mariposa de tinta
y mi voz la tercera lágrima del faquir
con una ausencia pegada a los pies

mi voz está en el faquir que camina sobre el fuego
sonriendo al turista y al niño de ojos grandes,

mi voz está en el faquir que en la penumbra se duele:
hay quemaduras peores que las del incendio,
cuchillos de palabra y gesto,
rutinas en el monzón de la noche...

aún mojadas de sudor y lluvia
lleva caléndulas al río
cuando el amanecer
le descubre un rostro muy cerca.

Sonríe. Ya no está solo.

jueves, 18 de noviembre de 2010

tus brazos eran carámbanos
junto a mi voz desértica


fuimos un charco de agua tibia.
hay matices y fragmentos
que no intuimos a primera vista,
en el primer poema de la tarde,
la voz del momento,
la llamada a otra tierra
el retorno al olvido,
la cicatriz de la luz.

Por eso, como los pájaros,
volamos más alto después del invierno.
en la radio
suenan todas las palabras que no escuchaste,
el sol es un solo espejismo
que nos ve amaneciendo demasiado tarde.

Las palabras permanecen,
las palabras acallan,
las palabras gritan,
para olvidarlas
suelo cantar una canción que tus poemas desconocen.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

tiempos verbales.

naciste en la Antártida
(por eso eres tan fría y no te gusta abrazar)
estudias en Salamanca
( y sueñas con un río que te lleve lejos)
morirás en una cabaña de los Andes
( y nadie sabrá localizarte).

sobre el cosmos

mi noche
fue tu día
en la selva de los caminos truncados,
y la lluvia era un rayo de miel
sentado a distacia prudencial.

No puedes conocerme:
aún soy la estatua oculta tras la hiedra.

is it worth it?

¿cómo describir la forma de mirar de John Berger
el tranvía más viejo de Lisboa,
la ropa tendida bajo el sol de invierno,
las flores heladas en el cristal de la casa Lis,
los chocalates cuando atardece el frío,
los álamos que saben escuchar?

La poesía es una invitación
a conocernos en el mundo.

Calendario de ausencias.

Hoy me faltas aquí.
En julio saltabas entre los rascacielos de Dubai.
Septiembre hizo que te imaginara junto a la costa del mar muerto
Llegó octubre y creí distinguirte en aquel museo de Berlín.
¿Dónde me faltarás mañana?
no me ates a tu tierra
o huiré por esta ventana de luz,
por esta tormenta en el cuerpo,
por la garganta de la nube encharcada,
por el musgo en la piel de la puerta.

soy un personaje
que deja de existir
cuando (demasiado) te acercas.

martes, 16 de noviembre de 2010

falacia afectiva.

el infierno de Dante
nos llega con cuentagotas,
hay juegos más
adictivos que el póquer,
y bad romance-s más profundos
que los de Lady GaGa.
Jorgue Guillén
reformulaba sus poemas
poniéndoles puntos y comas compulsivamente:
tu disconformidad te hará eterno.
"nosotros somos como somos, por desgracia, por textos como este"

lamentablemente,
tanto bodrio
distorsiona la perspectiva más certera.

y lo irónico,
es que aún esperamos palabras
que nos guarden.

fracaso

fR-ACA-S-O
fra-ca-so
FRAcaSO

es esa herida mal cerrada,
adelfa mortífera,
limbo sombrío,
sonrisa torva...

que nos oscurece solo cuando le prestamos atención.
se nubla en ti el mar negro:
incapaz de entrelazar más cabos,
las descripciones no te cuadran
y tiemblas rompiéndote como hoja otoñal

debías saber de antemano
que ni siquiera lloran los cisnes
al vernos doblar la esquina con la muerte.

....

torpe vanidad
ante la lumbre en el rostro,
baja compasión
ante las lágrimas del mar,
devastadora derrota
sobre estos cuerpos enajenados.

una vez más,
el mundo nos conserva los viejos defectos.
junto al estanque
se dolía el nenúfar,
cerca había un ciber
donde los niños jugaban a matar o morir
mientras comían regaliz.

te dije que
tenían la voz lluviosa
y sus gráciles manos eran sombras de agua y sueño.

buenas noches susurraste
alargando mi vigilia un poco más,
aquella noche el mundo estaba cerrado
y cayó de la luna un sueño de pajáros de hierro
cuando la voz menguó
para escuchar el aullido de esta tierra expectante.

Éramos un galimatías
en el cuerpo del sol extraviado,
llovía sobre los cristales
de la hora descuidada,
sé que creías NO PUEDO
cuando el volcán quemaba
y por primera vez, sentías algo semejante a la belleza.
no sabes despedir lo que no dejarías marchar
pues has aprendido
que la caricia más cálida
es la que ya no sentimos.

lunes, 15 de noviembre de 2010

see you at the bitter end.

el cielo muere cada noche,
la tierra no es la que sentiste ayer,
ni este otoño volverá a nosotros,
los trenes no son nunca iguales para quien vive huyendo.

el invierno se llevará el beso,
mi cuerpo hivernará durante un milenio,
pero seguirás escuchando
esa única canción siempre viva en mí.


Mira, aquí llegan los fantasmas: todos me traen tu nombre.

OPIUM.



la literatura es como el amor,
un bello trance,
solo que infinitamente más largo.
los payasos están de huelga
pero eso nos da igual,
el cielo no está en venta( por ahora)
y eso, aún, algo importa.
premeditadamente,
olvido los guantes
cerca de tu cuaderno,
quiero que pasen cierto tiempo juntos.
el escritor escribe sin que nada ni nadie lo coaccione.
Ainhoa Sáez.

nada te impulsa,
nada te mueve,
pero escribes escribes
hasta agotar las letras.

lo esencial se da por sentado,
te cansa antes del sueño,
y el cielo es igual, la tierra es igual,
todo es tan previsble, interesado, convencional,
odias la palabra "convención"
y miras por la ventana
distante como siempre,
pues nada en ti remite al mundo real.
cuando lo externo
se acumula
lo interno se queja
rebotado.

no hay historia verificable
ni ensayo,
ni no ficción
que me diga que el despertar,
mañana será bello.

domingo, 14 de noviembre de 2010

tipo yo


me caes bien:
no porque miremos el mismo punto
desde las murallas
ni porque pidamos el mismo café cortado
ni por encontrarnos en la misma canción
ni por atropellarnos con la misma palabra
ni siquiera por elegir este camino
y quedarte conmigo.

me caes bien
porque eres tipo yo.
te hubiera gustado encontrar más palabras en mí para destruirme
pero no están.
estoy aprendiendo a callar:
quiero ser inexpugnable algún día.

No soy como tú, soy diferente.
Almudena Vidorreta.

nunca juraste nada,
solo sonreías al oír el eco del
mar en mi piel,
por eso no hubo quejido
cuando me dejaste en tierra con mil preguntas
y la tinta nublada

por eso aún busco
tu luz en las calles de la noche

por eso
aún bebo tu lluvia
hasta inundarme

por eso escribo para encontrarme
en otra boca,
en otra sangre,
en otra voz.

pero es inútil,
bien ahogadas
están las respuestas en el mediterráneo.
Y dicen que más estrechamente ya no es posible unirse
Y que más irreversiblemente ya no se puede amar...
Ana Ajmtova

el gesto se contiene
ante la puerta infranqueable
de este invierno prematuro,
aquí vienen las nubes sin invitación.

esta noche cogeré un billete al fin del vacío,
y si no llego, al menos lo versificaré,
el silencio no es versificable
el silencio es como tú.

las distancias nos empequeñecen,
oír "nunca" es una quemadura leve
al viajar descalzos
sobre conversaciones descarnadas.

los libros que caen a tu alrededor
son flores secas sobre mi piel,
llegamos al final del prólogo
¿con qué tinta escribirás nuestros cristales?

aún quedan cerezos
en el cuerpo del sueño,
mientras mirando al sur
desvisto dulce
otra de tus mentiras de algodón.

sábado, 13 de noviembre de 2010

pas de excuse

ayer hablamos de ti
pero estabas lejos,
lejos como lo no presente
como una canción de los cincuenta,
en un lugar donde no se vuelve dos veces,
inaccesiblemente bella.
no quiero desentenderme de las calles
para que tú pasees por ellas inconstante,
antes de que el sol se debilite en mi lluvia
vendrás con fuerza de deseo incendiado
y sé que tu boca será mi ataúd.

viernes, 12 de noviembre de 2010

http://kaleurrunak.blogspot.com/


pido una ventana más
para empaparnos de luz este invierno.
************************************
KALE URRUNAK

si pretendes acercarte a mí
elige la calle más lejana

**************
nigana heltzeko,
kale urrunena hautatu.

un poema de Emily Dickinson


Soy nadie. ¿Tú quién eres?
¿Eres tú también nadie?
Ya somos dos entonces. No lo digas:
lo contarían, sabes.

Qué tristeza ser alguien,
qué público: como una rana
decir el propio nombre junio entero
para una charca admiradora.
las flores de invierno me gustan más
porque sobreviven a los cortes del hielo.

Donnie Darko busca una razón para un mundo amenazado,
las amapolas son azules porque tú lo dices,
el universo es otro mapa desplegable
que respiro soñando en una nuez.

Donnie Darko está muerto, pero no lo sabe,
tampoco sabe verme tras la pantalla,
comiendo palomitas
en este poema de viernes lento.
¿y si no somos de goma?
la flexiblidad del viento me contagia,
se marea el pulso de la tarde
al verme siendo una sombra de lluvia.

¿Recuerdas?
El trasatlantico nos dejó en tierra
y tuvimos que reconstruir el mundo por enésima vez.

el año llega y se va
y nosotros con él
como reflejos de un tiempo antiguo,
como un cuento de acordeón y beso,
como el hoy desvistiendo al mañana,
como el parque de la luna menguante,
como los cuerpos y sus estatuas de sal.
las palabras son menos confusas de lo que te proponías
al soñar que también este poema
fue un enigma en la piel del bosque.

ya sabes
que mis manos de arcilla
llevan hojas muertas en la frente.




y quizás
no debiste saltar sin paracaídas
y quizás
escuchabas el grifo creyendo escuchar el río,
y quizás
solo fuéramos una metafóra
en el divorcio del café.
cuando tu voz de maíz y lluvia
es mi mirada a través de la ventana
Holden Caulfield nos sonríe comprensivo
y no importa si llegas tarde al mar.

jueves, 11 de noviembre de 2010

noviembre
es el declive
de un cuerpo al atarse,
una lluvia
de jenjibre y tierra seca.
el olvido llega
en un flashback
porque finjo no mirarte
a través de la cortina.
nudos.
demasiados nudos,
tantos que se extingue el deseo,
pero el cielo es tan azul
que siento la cálidez de tus huellas.

Ése es Ginsberg gritando contra la niebla,
el tren que huye sin dolerse,
la luz que llega a los niños,
el cuento que no supiste escuchar,
la caricia de la nieve sobre otro cuerpo.


y éste el tiempo
que hoy ruge con mi voz.

el gato
silenció
al escritor que tanto hablaba,
zozobraron sus palabras contra el arrecife de mi piel,
mi piel es una lágrima en el espejo,
el pájaro de color magenta.

pensé que el otro tiempo era mentira
y ahora solo nos cautiva el rumor de las olas.
Noche insomne
y amanecer de vainilla atardecida,
¿qué pedazos de mí reciclarías?
hay un collage con demasiados nombres
y tan pocos cuerpos...

se me llenan de sal los párrafos,
quizás tanta nube nos ciegue antes del sueño.


la noche llega como un girasol apagado,
aún canto la canción de los días inadvertidos
y solo tú
te giras para escucharla.

très loin

el día nos quiebra como a una caña de bambú:


sonrío tibia,
pero muy lejos.

Un poema de Luis Llorente.

Los suburbios se deshacen en la noche,
algo tiembla y nos miramos
como nombres olvidados en la lluvia,
como cuerpos escondidos en la niebla.
Los bares han cerrado.
Noviembre en su temblor de hojas
arrasadas en la melancolía de la calle.
Somos de un cielo inaccesible,
el delirio de un viaje inacabado
en la música de los cristales de tu rostro.
La noche inmensa
debe terminar en esta gota de agua.
Y el agua es una forma de espejismo,
una forma del amor
que empieza como sombra de río
sobre pieles de caballo muerto.
Nos movemos en el ritmo de la luna
y en su transparencia la muerte es un ojo de cadáver.

Nunca olvides este pasadizo,
ahora mis manos pueden romper todos los huesos de tu noche,
y tu noche es una tierra prometida,
en labio azul que nunca acierta
en la diana del olvido y del insomnio.

Abro los ojos y respiro.
Veo mi rostro en el espejo.
Abro los ojos y te amo.

11-11-2010
Luis LLorente Benito.
De su poemario
" Geografía de lo ausente"
lo aceptable
es casi tan aburrido
como un día sin poesía,
como una canción con voz estándar,
como el Nescafé sin aroma,
como los noctámbulos en el mismo bar,
como lexicografía los jueves por la tarde.

míranos,

llevamos un siglo devorando distancias
y seguimos lejos de la luz.

miércoles, 10 de noviembre de 2010

he ideado un plan
donde solo las nubes
me nublan de vez en cuando,
he ideado un plan para que mi voz
esté antes del miedo.
ese peso en el hombro,
esa página medio escrita,
esa frase que no supiste acabar:
es el tiempo
que ya no es mío,
ni tuyo...
es el tiempo
que no nos llega como queremos.

lunes, 8 de noviembre de 2010

l' esquive


si me dijera usted, de pronto, que me ama
yo ni me detendría para hacer la maleta,
huiría luchando contra el miedo a la costumbre de su cuerpo.

Almudena Guzmán.

La costumbre es nuestra herradura,
somos una especie de adicción convulsa,
cuerpos que buscan una huella,
pájaros de luz en la noche más fría,
crecemos en el desasosiego del escritor
antes de acabar el capítulo,
el día nos traza al azar
y necesitamos cuerdas
para no bailar con el vértigo.

la resistencia dura solo un rato
bien sabes que nos quemaremos antes del sol.

un poema de Almudena Guzmán.

Este hombre que ahora cerca mi cuello...

Este hombre que ahora cerca mi cuello
con su sabia muralla de labios
quizá abandone de pronto la almena,
quizá desaparezca para siempre.

Porque tiene un tacto en la mirada
que recuerda las plumas de los pájaros.
sigo siendo un entramado
de sellos sin carta,
rasgo el tiempo por rutina
mientras tanto, mantén los horarios
pues quizás te ayuden a no extraviarme.
quedan dos minutos
y el sombrero se te tuerce a un lado,
pero solo los guantes
guardan ese matiz
del recuerdo latente.

domingo, 7 de noviembre de 2010

en el silencio
( lugar muy muy lejano e inexacto)
podría nacer la primera canción

podría ser jazz, punk, heavy, blues, rap...

sin ataduras,
tan solo algo sugerente.

deshilvanada cmo yo....


desamparo en mesas vacías,
anestesia con sabor a té rojo,
al repetirse ya no hay adivinanza,
el presente corta imágenes
para hacer un collage a través del tiempo.

este tigre se impone una disciplina
antes del funeral del fuego.

Las rosas sueñan en jarrones llenos de polvo y tierra seca,
nuestros gestos descansan en mi caja de zapatos,
el tren, al pasar corta las ramas de tomillo,
todavía me detengo al creer que aún estás...

Solo no nos engaña lo que, siendo engañoso, no puede ya dañarnos.
T.S. ELIOT

la inmunidad
es posible solo en teoría,
al vivir
te arrugas y sonríes,
descubres y reprochas,
escribes y silencias.

MANIFIESTO.

siempre he querido ser poeta
( nunca me gustó la pasividad de la musa)
pido un café, un té
o algo para permanecer lejos de mí.


sabes que espero algo, espero algo
pero ese algo perdió el pasaporte.

suena una canción,
conozco el momento
no sé si hay motivo
ni llegan los perros a mi luz.

se nubla el cuerpo del cielo
porque rasgo distancias con cucharilla.
noviembre me deja sin tinta,
despacio encuentro las acacias
que escondiste bajo la trampilla,
aún me queda esa sonrisa de niño inquieto,
el recuerdo de una bruma ligera...

hoy el amanecer sabe a menta
y al encontrarte
no queda lluvia en mi poema.
nadie desea encontrar la misma senda
si distingue en ella más de cuatro espejismos....

¿recuerdas aquella cometa y el niño o el cielo sin heridas?

no, lo siento, no queda tiempo para dèja- vu.
junto al patio de hojas secas
otro sueño viene a jugar,
tras el apagón
la mañana llega frágil,



quizás nos habíamos perdido
antes de tiempo.

viernes, 5 de noviembre de 2010

Debieron morir ambos;
se amaron en exceso.

Heinrich Heine.


Aurea mediocritas,
aurea mediocritas
no te atrevas a evitarme
pues solo en ti hallo refugio este invierno.

los límites golpean.


vuelvo al siglo XVIII,
pues los ilustrados son aburridos pero no lloran.

sueño sucio.

"la muerte es también un aprendizaje"

me dijo el ciervo herido
antes de huir al lugar sin luna





aún hoy me pregunto si debí seguirlo o no.

jueves, 4 de noviembre de 2010

hay enigmas sin formato
y días demasiado ambiguos
para dar con respuestas.


antes del final de la luz el principio del fuego,
antes del no un sí atardecido,
antes del gesto la palabra,
antes de la palabra un sueño.

miércoles, 3 de noviembre de 2010

no me convencen
los atradeceres made in hollywood,
ni los cuentos con final previsible,
ayer soñé que conocía a Rohal Dahl
en un café oscurecido
y contestaba sin titubeo.

NO soy la chica de piernas de mantequilla
que creíste ver,
pues en la montaña
aprendí a temblar menos que tú.
pierdo el reloj,
llevo los zapatos desatados
y una maleta demasiado grande,
sin embargo,
ésta vez sonrío triunfal.

he perdido el turno
y lo mejor es que no importa

hoy tengo una certeza,
está muy cerca de tu voz.

la vida

es pura cuestión de óptica

si aprendes a mirar,
el mundo se desplegará.
traslado mi lluvia
a otra parte,
pues tu voz tiene frío
y el color tostado del sol
quema nuestro deseo embotellado.

El paraíso nunca sangra pero es de cartón-piedra


...por eso no hemos llegado aún.
el mes de los caminos difíciles
llegó al tercer peldaño
cuando la gravedad
nos perdió
en una jungla de ópalo y flores secas,

la joven dijo que quería quedarse,
no sabían callar sus gestos,
pero con una sola sugerencia
supo conmover el sentir más ennegrecido.

martes, 2 de noviembre de 2010

ensimismadas
las calles dejan de mirar.
pero ella no está ahí,
ella descansa en otra parte,
deshace el frío con incieso y luz cálida,
calla para que le dejen pensar sola,
las paredes son grietas en ella,
sus manos pájaros en peligro de extinción,
llueven palabras y la partitura
graba el espejismo de un cuerpo orgulloso
como si fuera otro instante en un bosque de niebla,
como si la luna no siguiera mañana,
como si el color la hubiera traicionado,
como si el sur añorara el aullido del lobo,
como si hubiera bebido la última gotera de la luz....


y después de las metáforas,
después del granizo y las bocas de regaliz,
bacila antes de caer
con mansedumbre fingida
sobre el poema que ya no está.
la mímesis de un cuento
rasga mi papel
en siete.
aún soy ese pájaro verde,
aún sueño y el eco llega más allá de la frontera,
aún no arde la ciudad,
aún queda vida en los liquenes de mi memoria,
este pelo es una explosión de silencio,
y el último gesto la llave que buscaste en vano.
noviembre sabe a lluvia
en un cielo azul.

y no sabemos qué decir
cuando nuestra humanidad
nos limita
a sentirnos azules.

En noviembre pongo un poster de Burt Lancaster,
paseo junto al río
y espero ese no se qué antes de que caigan las hojas...