domingo, 17 de enero de 2010

winter skin

contusión
en mi gesto desarticulado
cuando baja la marea
y nos descubre
más viejos
y con menos caricias
tatuadas
en la piel reseca
por el frío invierno.

Olvido las pautas
y el destino queda postergado.

No hay presente
ni resignación posible
en los cuerpos descompuestos
que se unen en bares
para vertir poesía
paliando dolor atragantado
como espina
en la garganta del tiempo.

2 comentarios:

Victor Balcells Matas dijo...

bravo :)

ane dijo...

muchas gracias víctor =)
me ha gustado mucho la historia de Augusto Espejo, las hormigas muertas y el khandavia!